Google en guerra con los Pop-ups
Seguramente estás utilizando (vamos, que seguro que sí) el márketing de contenido o inboud marketing como parte de tu estrategia para conseguir leads. Si lo primero que piensas es que las dos definiciones te suenan a lo mismo, estás equivocado. A mí también me costó entender la diferencia, pero te lo explico muy brevemente. El…
Seguramente estás utilizando (vamos, que seguro que sí) el márketing de contenido o inboud marketing como parte de tu estrategia para conseguir leads.
Si lo primero que piensas es que las dos definiciones te suenan a lo mismo, estás equivocado.
A mí también me costó entender la diferencia, pero te lo explico muy brevemente.
El marketing de contenidos consiste en crear contenidos que sean capaces de atraer la atención del público y promocionarlos.
El inbound es el arte de conseguir que sea el usuario quien te busque y se sienta interesado en tu empresa o servicio y acaben comprando.
Quería aclarar estos dos conceptos para poder hablarte de la conveniencia de utilizar como estrategia generadora de subscriptores los famosos pop-ups o las actualizaciones de contenidos (content upgrade)
De entrada te diré que el 95% de los usuarios odian los Pop-ups y muy cerquita, un 94%, no les gustan las cargas lentas de la web.
Millones de páginas web utilizan ventanas emergentes para recoger ese maná, llamado dirección de correo electrónico a los visitantes, como una de las maneras más efectivas para aumentar el número de subscriptores.
Muchos usuarios se quejan de que proporcionan una mala experiencia, especialmente con las ventanas emergentes que cubren toda la página.
Ponte en situación. Imagina que pasas por una tienda de ropa y te quedas mirando el escaparate.
Te fijas en una bonita chaqueta y decides entrar para verla, probártela y si el precio te interesa finalmente, comprártela.
Tus pensamientos han perdido a favor de tu cerebro consumista.
Decides entrar por la puerta y ¡zascas!, te sale un dependiente con un enorme letrero bocinando descuentos, ofertas y hasta café gratis.
¡Te asustas y te das media vuelta!
Pierdes un cliente y tu confianza.
¿Por qué ocultar el contenido cuando los visitantes los tienes a tus pies?
Mi opinión es que muchas de las quejas sobre los Pop-ups es motivado por la irrelevancia de los contenidos o de la oferta que muestra la ventana emergente.
Los visitantes del sitio web harán clic en la X, principalmente porque el contenido que ofrecen no tiene ningún interés para ti.
Ahora Google ha decidido que las ventanas emergentes proporcionan una mala experiencia de usuario para los visitantes de un sitio web, y en enero de 2017 se va a penalizar el SEO si el rastreador de Google “Googlebot” busca en tu sitio y encuentra una de estas dichosas ventanitas emergentes que considera que no mejora la experiencia del usuario.
Esta decisión no sólo podría ser un duro golpe para las empresas que utilizan el marketing de contenidos como parte de su estrategia de generación de leads, sino que también va a diezmar el enorme mercado de las compañías que publicitan su software, incluyendo la gran cantidad de plugins de WordPress, como OptinMonster, Pippity o SumoMe, cuyo negocio se construye alrededor de la humilde ventana emergente.
Toca buscar alternativas para conseguir convertir visitantes o métodos para crear backlinks a tu sitio web sin necesidad de crear contenido.
La decisión de Google para sancionar las ventanas emergentes es probable que tenga un efecto importante en la industria del márketing y las empresas que las apoyan.
Las conversiones no son personas.
Google Analytics te mostrará que han aumentado tus conversiones y que las personas adoran tus ventanas emergentes, pero no es así.
Es muy poco probable que les guste.
Y es bastante probable que no sepan que contenido hay tras ellos.
Y también será bastante probable que no sepan cómo cerrar la misma.
Yo mismo he podido comprobar el perjuicio de los popups en una tienda online que administro.
Probé durante un mes con un test A/B en la portada.
El test A mostraba la suscripción a la tienda ofreciendo un descuento del 10% y el test B no mostraba nada.
Pude comprobar en Google Analytics que el número de visitas a páginas subió un 72% y el porcentaje de rebote bajó casi un 49%.
Es cierto que con el popup obtuve suscripciones con el descuento para comprar.

Pero el embudo de conversiones mostró sólo 2 ventas en ese mes.
Miseria y compañía.
El problema es que un buen contenido cuesta dinero y hay mejores maneras de conseguirlo sin molestar a los visitantes.
¿Por qué no pagar por un buen contenido en vez de dar más valor a un me gusta en Facebook?
Esto es un indicador de que la experiencia de usuario destronará al SEO y escribir contenidos ayudados por el respaldo de datos ayudará a tu reputación online.